AGRICULTURA ECOLÓGICA
La agricultura ecológica es un sistema
para cultivar una explotación agrícola autónoma basada en la utilización óptima
de los recursos naturales, sin emplear productos químicos de síntesis, u
organismos genéticamente modificados (OGMs) -ni para abono ni para combatir las
plagas-, logrando de esta forma obtener alimentos orgánicos a la vez que se
conserva la fertilidad de la tierra y se respeta el medio ambiente. Todo ello
de manera sostenible y equilibrada.
Los principales objetivos de la agricultura ecológica son trabajar con
los ecosistemas de forma integrada; mantener y mejorar la fertilidad de los
suelos; producir alimentos libres de residuos químicos; utilizar el mayor
número de recursos renovables y locales; mantener la diversidad genética del
sistema y de su entorno; evitar la contaminación a resulta de las técnicas
agrarias; permitir que los agricultores realicen su trabajo de forma saludable.
La producción ecológica está regulada por una estricta normativa de la Unión
Europea, que recoge exigencias en materia de producción vegetal, animal, así
como de inspección, certificación y etiquetado. El resultado es que los
alimentos ecológicos están sometidos a unos controles adicionales, realizados
por entidades de certificación autorizadas e independientes, que garantizan su
autenticidad.
Los productos agrícolas ecológicos son buenos porque:
- Son alimentos naturales, saludables y con todas sus propiedades
nutritivas
- Por su sabor y diversidad
- Son de calidad certificada
- De producción sostenible
- Evitan la contaminación y
favorecen la biodiversidad
- Contribuyen al desarrollo de las
zonas rurales
https://www.compromisorse.com/sabias-que/2010/03/30/que-es-la-agricultura-ecologica/
Qué es la agricultura ecológica
La agricultura ecológica es un
sistema de producción agrícola basado en la utilización de procesos y recursos
naturales —no se emplean productos químicos (fertilizantes o plaguicidas, por
ejemplo) ni organismos genéticamente modificados (OGMs)— con el fin de
obtener alimentos más saludables y nutritivos al
tiempo que se protege la fertilidad del suelo, se evita la propagación de
plagas y se respeta el medio ambiente. Es un sistema que, en lugar
de servirse de insumos agrícolas, lleva a cabo prácticas específicas
dependiendo de las características de cada ecosistema.
El desarrollo de esta unión
entre agricultura y ecología se produjo durante el siglo XX como respuesta a la generalización del uso de ciertos plaguicidas y
fertilizantes, que prestigiosos estudios asocian a enfermedades
como el Parkinson o diversos tipos de cáncer, así como a mermas en las
poblaciones de algunas especies animales. En la actualidad, la agricultura
ecológica se nutre tanto de buenas prácticas agrícolas del pasado como de
innovaciones tecnológicas ligadas al smart farming y de conocimientos modernos sobre fertilización de
suelos o manejo de plagas.
Objetivos de la agricultura ecológica
De acuerdo a la Comisión Europea (CE), alrededor del 8,5 % de la superficie agrícola de la Unión
Europea (UE) se dedica a cultivos ecológicos, un dato que al ritmo
actual aumentaría hasta el 15-18 % en 2030. Para impulsarlo aún más, la CE
cuenta con un Plan de Acción para el desarrollo de la producción
ecológica [PDF]Enlace externo,
se abre en ventana nueva. a través del cual espera elevar esta cifra hasta el
25 %. Según este mismo organismo, los objetivos de la agricultura ecológica
son:
El uso responsable de la energía
y los recursos naturales.
El mantenimiento de la biodiversidad y el bienestar animal.
La conservación de los equilibrios
ecológicos regionales.
La mejora de la fertilidad del
suelo y de la calidad del agua.
Tipos de agricultura ecológica
Agricultura orgánica
Surge de las ideas del botánico
inglés Sir
Albert Howard (1873-1947), quien desarrolló una parte
importante de su carrera en la India. En su libro Un testamento agrícola, Howard expone las
bases de la agricultura orgánica: suelos saludables
para mejorar los cultivos, uso de coberturas permanentes y explotación racional
de los recursos locales. Para Howard, la conservación de la
fertilidad del suelo es la primera condición de todo sistema permanente de
agricultura y, además, esta forma un todo indivisible con la salud de las
plantas, los animales y el ser humano.
Agricultura biodinámica
Esta forma de agricultura fue
creada en 1924 por el filósofo alemán Rudolf Steiner (1861-1925),
basándose en un movimiento espiritual también fundado por él, la antroposofía.
Uno de sus ejes centrales es la idea del organismo-granja, es decir, entender la granja como un ser vivo en el que cada órgano interactúa con los demás en
beneficio del todo y del cosmos. Una de las peculiaridades de esta escuela es que usa la posición de
los astros para elaborar los calendarios agrícolas.
Agricultura natural
Influido por el concepto taoísta
del wu wei el biólogo
japonés Masanobu
Fukuoka (1913-2008) ideó esta corriente agrícola basada en
la no intervención. Fukuoka se
guiaba por principios como no trabajar la tierra, no
usar abonos, fertilizantes o pesticidas, no arrancar las malas hierbas o no podar. De acuerdo a este modelo, si la naturaleza ha sabido
desarrollarse por sí sola desde el principio de los tiempos, la intervención
del hombre solo pone trabas a ese crecimiento natural y genera un trabajo
inútil al agricultor.
Además de estos tres, otros
tipos de agricultura ecológica con aceptación a nivel mundial son la permacultura, que
busca crear ecosistemas en equilibrio a través de una
aproximación holística, o la agricultura biológica, que se
caracteriza por la importancia que otorga al control biológico de plagas y a la
teoría de la trofobiosis —la relación entre plantas e insectos—.
Ventajas y desventajas de la agricultura ecológica
Entre las principales ventajas
de la agricultura ecológica cabe destacar:
La producción de alimentos
más saludables y nutritivos, además de
más sabrosos.
El rendimiento aumenta, en
concreto, según Greenpeace, puede producir alrededor
del 30 % más de alimentos por hectárea que la agricultura convencional.
La biodiversidad mejora. De
acuerdo a la UE, los campos ecológicos tienen
alrededor de un 30 % más, lo que aumenta la resistencia de los
cultivos al cambio climático.
Se reduce
el número de plagas a través de medios naturales, por ejemplo,
introduciendo insectos beneficiosos y pájaros que se alimentan de esas plagas.
Al ahorrar en productos
químicos, los agricultores ecológicos obtienen más
ingresos que contribuyen a desarrollar la economía de las zonas
rurales.
No contamina ni el suelo ni el
agua y consume menos energía que la
agricultura convencional, lo que beneficia al medio ambiente.
Las críticas a la agricultura
ecológica giran en torno a una supuesta incapacidad
para alimentar por sí sola a la creciente población mundial, aunque
no hay estudios concluyentes al respecto. Otra crítica, esta sí respaldada por
datos, es que los productos ecológicos son más caros para el consumidor, resultando
menos accesibles para los sectores de la población con menos ingresos.
https://www.iberdrola.com/sostenibilidad/agricultura-ecologica
Conclusión
La agricultura
orgánica contrarresta el agotamiento de los recursos (suelo, agua, energía,
nutrientes), contribuye de manera positiva a los problemas relacionados con los
cambios climáticos y con la desertización y puede colaborar para mantener y
mejorar la biodiversidad en una escala global.
Bibliografía
¿Qué es la agricultura ecológica? - ¿Sabías que? - Compromiso RSE. (n.d.). Compromisorse.com. Retrieved March 10, 2022, from https://www.compromisorse.com/sabias-que/2010/03/30/que-es-la-agricultura-ecologica/
Agricultura Natural. (2020, March 10). encolombia.com. https://encolombia.com/economia/agroindustria/agronomia/agricultura-natural/
de Agricultura y Desarrollo Rural, S. (n.d.). El reto: una agricultura sustentable, productiva e inclusiva. Gob.Mx. Retrieved March 10, 2022, from https://www.gob.mx/agricultura/articulos/agricultura-sustentable-una-buena-practica-social